Una mentira mil veces repetida se convierte en una verdad (Joseph Goebbels)

viernes, 6 de marzo de 2015

Miradas insumisas de Alberto Mira



Con toda la información disponible en Internet sobre cualquier película, a veces no es fácil defender la necesidad o la conveniencia de un nuevo ensayo sobre cine. Pero Miradas insumisas se adapta a los nuevos tiempos: es el resultado de un estudio llevado a cabo durante dos años a través de su blog. El autor, Alberto Mira, no se ha limitado a investigar por su cuenta en búsqueda de películas con contenido o con mirada LGTB (Lésbica-Gay-Transexual-Bisexual), sino que ha tenido en consideración las aportaciones de los lectores del blog y ha aprendido de ellas.

El libro no llega a ser una obra 2.0, pero sí ofrece muchas veces diferentes versiones o lecturas de la misma película: estudia cómo títulos en su día polémicos por sostener un discurso presuntamente homófobo, como A la caza o Instinto básico, son interpretadas en otro sentido por muchos espectadores, al mismo tiempo que se plantea si otras obras en apariencia claves en la historia del cine gay acaban teniendo un discurso más convencional y menos liberador de lo que parece, como el caso de Brokeback mountain, que podría no suponer según el autor un gran avance desde Maurice, realizada 18 años antes. Y es que el público con sexualidades diferentes a la normativa heterosexista desarrolla lo que el autor denomina una mirada insumisa, es decir, subvierte y reinterpreta lo que ve en la pantalla para poder adaptarlo a su propia experiencia sexual y emocional.

Además de ser todo un tratado de historia del cine LGTB y la obra más ambiciosa y completa escrita en español acerca de la homo-bi-transexualidad en el cine, tal vez lo más interesante de este ensayo es que plantea un acercamiento al análisis fílmico bastante rompedor. No intenta valorar o indagar acerca de la intención del autor de la película, como suele ser lo habitual, sino que considera dichos propósitos como irrelevantes, o al menos como algo secundario frente a la recepción de la obra por parte de los espectadores. De poco importa si muchas estrellas, guionistas o directores tenían o no tendencias o comportamientos gays en su vida privada, ni si buscaban o no de manera consciente la complicidad del espectador gay, ni si este último está captando el verdadero sentido de la película o distorsionándolo para llevarlo a su terreno: lo realmente relevante es la vivencia del receptor de una obra y la vida propia que ésta acaba teniendo una vez producida.

Más información:
Liz Hamilton (blog en el que se inspira el libro)
Entrevista con el autor

No hay comentarios:

Publicar un comentario